Esto vale la pena



El Señor me ha regalado en los últimos meses una nueva familia espiritual, un movimiento de parejas cuyo carisma propio es la espiritualidad conyugal, con una fuerte orientación que conduce a la pareja a vivir, día a día, según la voluntad de Dios, es decir, según los valores del Evangelio. Dentro de este movimiento soy Acompañante Espiritual de varios equipos y la misión la resumo en llevar a las parejas más y más a Dios. Hemos comenzado junto con los equipos una avanzada misionera que le llamamos Jornadas de Pesca, donde yo como Acompañante Espiritual lanzo las redes, y ellos recogen para formar más equipos de parejas que quieran vivir una espiritualidad conyugal en santidad. 

Les comparto que el pasado sábado fuimos juntos a una Noche de Evangelización y Adoración con varios de los equipos, y una de las parejas que estaba organizada para acompañarnos terminó en el hospital con uno de sus hijos ya que tenía fiebre muy alta y los resultados diagnosticaron dengue. La doctora que lo atendió les dijo a sus padres que tendría fiebres altas hasta por 3 días y todos sabemos lo peligroso que es este tipo de fiebres. El domingo le escribo a la mamá preguntando por el niño y me comenta que seguía malito y con mucha fiebre y mi respuesta fue la siguiente: Busquen Sabiduría 16, 12, la leen en voz alta y le imponen la Biblia en la cabeza y le dicen a la fiebre que se vaya y listo; con FE. Hay algo que no le dije a su mamá: el niño te va a decir que se siente mejor, pero lo comenté acá en casa. Al rato me escribe la mamá y me dice: Eduardo estoy feliz y me comenta esto: puse a mi esposo a buscar la Biblia en el libro de Sabiduría y nos arrodillamos con la Biblia en la mano y le oramos ese versículo, y lo dejamos allí dormido; cuando volvimos a ver usted qué creeeee, el niño estaba bañado de sudor como si fuera agua lo q se le hubiera tirado, abrió los ojos y me dijo mamá me siento mejor. 

Te he contado todo esto, porque la primera lectura de hoy, tomada de 1 Ts. 3, 7-13, Pablo nos habla de la fe de sus hermanos de Tesalónica. Escudriñemos los versículos 7-8: "Hermanos: en medio de todas nuestras dificultades y tribulaciones, la fe de ustedes nos ha dado un gran consuelo. El saber que permanecen fieles al Señor nos llena ahora de vida". Creo que ahora pueden comprender el gozo que hay en mi corazón. 

Quiero que me acompañes adentrándonos en esta experiencia que te digo con toda autoridad y humildad, que también es mi experiencia:

        En medio de todas nuestras dificultades y tribulaciones: siiiii, el seguimiento a Jesús no es nada fácil, hay dificultades y tribulaciones. Pero te digo algo mi hermano y hermana, es una promesa de Jesús en Jn. 16, 33: "Les he dicho estas cosas para que tengan paz en mí. En el mundo tendrán tribulaciones. Pero ¡ánimo!: yo he vencido al mundo". Esto es para ponerse de pie y decir a gritos un gran AMÉN, Jesús te invita a tener paz en Él; y ¿cómo se vive esa paz? viviendo en su presencia 24/7. No nos advierte que todo será bueno; al contrario, nos advierte que tendremos tribulaciones. La tribulación en el lenguaje bíblico es la experiencia general de los que viven en Cristo, es un medio de comunión con Él. Entonces, todo lo que estás pasando (aflicción, persecución, sufrimiento y angustias) es parte del proceso de Dios en tu vida y lo más poderoso es que ya Jesús las ha vencido.

        La fe de ustedes nos ha dado un gran consuelo: ¡wao! eso es lo que viví el domingo con la experiencia que les he contado. Esta pareja se convirtió en mi Tesalónica, porque me dio gran consuelo sentir y vivir su fe, son momentos que te levantan como evangelizador, que te empujan a seguir adelante en medio de las tribulaciones. Eduardo: ¿cómo haces para activar la fe y que ellos puedan realizar este tipo de milagro? Simple respuesta, vamos a Rm. 10, 17: "Así pues, la fe nace al oír el mensaje, y el mensaje viene de la palabra de Cristo". Más claro no puede ser, la fe nace al oír la predicación de la palabra de Dios y no de otra cosa. Hace 2 días hablé sobre esto, el púlpito es solo para predicar la Poderosa Palabra de Dios, porque a través de esa predicación nace o activamos la fe de los que la escuchan.

        Nos llena ahora de vida: hoy le compartía a un hermano que acaba de pasar una delicada operación y está muy agradecido con Dios y nos comentaba que no le alcanzaba la vida para pagarle. Mi respuesta fue, que no hay nada que pagar porque Jesús ya pagó con la última gota de sangre derramada en la cruz y que solo le diera gracias sirviéndole en fidelidad. La experiencia del domingo me llenó de vida, pero no es la vida física, sino, la vida plena en Jesús que me invita a seguir predicando su Palabra a tiempo y a destiempo, y aun con contratiempos.

Te puedo decir con mucho gozo hoy: Esto vale la pena.

Para los que quieren conocer el movimiento de parejas que les hablé al principio, son los Equipos de Nuestra Señora. Puedes conocernos en Equipos de Nuestra Señora – Movimiento Católico internacional para matrimonios cristianos (equipes-notre-dame.com)

Aquí en Panamá puedes seguirnos en el Instagram @ens.panama

Paz y bien.

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