Oveja o Cabrito
Mt. 25:31-46. Muchas veces encontramos en los semáforos personas que viven pidiendo dinero que sabemos muy bien que será usado para todo, menos para comer como te dicen; pero cada vez que los veo venir trato de ser oveja y ver en ese hermano o hermana a Jesús y simplemente le doy dinero y le explico a mi hijo que en cada uno de ellos está Jesús.
De eso se trata el Evangelio de hoy, ver en cada uno de los que me rodea, a la persona de Jesús y así la vida es llevadera porque comienzas a comportarte como oveja y no como un cabrito.
Dice el versículo 22: "y él separará a los unos de los otros, como el pastor separa las ovejas de los cabritos". Esto se refiere al final cuando Jesús venga a buscarnos, y hace esta comparación o mejor dicho división entre Oveja y Cabrito.
Veamos en qué consiste esta comparación para reflexionar qué somos en realidad:
Oveja Cabrito
Ser indefenso Siempre listo para hacer daño
Ser pacífico Les gusta el pleito
Se deja esquilar y sacrificar Muy traviesas
Se deja guiar Van de un lado para otro
Lenguaje tierno Berrea, grita
Jesús está buscando ovejas y no cabritos, necesita de hombres y mujeres en las Iglesias, colegios, oficinas, vías públicas que simplemente lo vean a El en los demás; gente que busque la paz, que sea mediadora, que se deje guiar, que su lenguaje sea tierno y dulce al hablarle a los demás.
Sé que ya reflexionaste si eres Oveja o Cabrito y te invito en este día a hacer los cambios que tengas que hacer en tu vida, porque el ser oveja te dará la felicidad siempre, nada te turbará, siempre tendrás el control de tu carácter, te morderás la lengua para no decir una palabra hiriente, en conclusión esto pasará cuando veas en cada uno de los que te rodean a Jesús.
Ánimo porque es una tarea difícil, pero la recompensa está en el versículo 34: "Vengan benditos de mi Padre, reciban la herencia de Reino preparado para ustedes desde la creación del mundo".
Oveja o Cabrito, tú decides.
Paz y bien.
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