Higos u Hojas

Mt. 21:12-22. Seguimos escudriñando en el Evangelio de Mateo y hoy vemos un pasaje que en lo personal me cuestiona mucho cada vez que lo veo, el encuentro de Jesús con la higuera.

En este pasaje Jesús siente hambre y se acerca a una higuera a buscar fruto pero solo encuentra hojas. Marcos en el capítulo 11 versículo 13 tiene un detalle que no lo presenta Mateo, "no era tiempo de higos". Tú y yo somos esa higuera y Jesús hoy siente hambre de paz, de amor, de fe, de misericordia, de consuelo, de alegría, de esperanza; está buscando una higuera donde conseguir esos frutos y espera encontrar esos higos y no hojas.

Para dar esos frutos no hay excusas; cuántas veces decimos no tengo tiempo, no estoy preparado, que lo haga otro, no tengo nada que dar, etc. Jesús está buscando higos, qué tienes para darle? Si solo tienes excusas, significa que solo tienes hojas y esto acarrea una sentencia de parte de El, "Que nunca jamás brote fruto de ti!"😕  

Hoy en nuestros templos nos encontramos con muchas higueras secas, amargadas, decepcionadas, negativas y la razón es que solo tienen hojas para dar y eso es lo que dan y cada vez que esto sucede cae sobre ellas la sentencia de maldición. Estas higueras secas tristemente las encontramos en el altar, en los ministerios de música, en las catequesis, en todos los rincones de nuestra iglesia, solo dando hojas.

Es hora que se levante en nuestras iglesias, en donde nos movamos día a día, una generación de hombres y mujeres, líderes y laicos que den higos a tiempo y a destiempo y aún con contratiempo.

Jesús está hoy frente a ti, tú decides darle Higos u Hojas.

Paz y bien.