El Llamado requiere Respuesta Hoy


Lc. 5:27-39. Ayer les compartía en el blog lo difícil que es testificar, ya que nos encontraremos con personas que se van a burlar, se escandalizarán, etc; y esto no era ajeno en el tiempo de Jesús.

Hoy nos encontramos con un hombre que es llamado por Jesús a formar parte de la comunidad de los Doce, llamado Leví o Mateo, y esta vocación o llamada es fascinante por el cómo fue de fulminante en Leví este acontecimiento. Sentémonos en el despacho de impuestos junto con Leví en los versículos 27 y 28: "Después de esto, salió y vio a un publicano llamado Leví, sentado en el despacho de impuestos, y le dijo: Sígueme. El, dejándolo todo, se levantó y le siguió."

Cuando me encuentro en las páginas del evangelio con este tipo de llamadas hechas por Jesús, me sorprende tanto, no la llamada, sino la respuesta inmediata por el que es llamado.

Jesús está formando su comunidad de los Doce, y en este caso confirma que Jesús incluye a todos en su comunidad, no es excluyente como suele ser hoy día en las congregaciones que dicen llamarse cristianas. Veamos un poquito, no quién era Leví, sino lo que era ser publicano: se les consideraban inmundos porque en su trabajo tenían que mezclarse con los gentiles, eran corruptos porque su profesión los llevaba a robar, estaban excomulgados de las sinagogas y excluidos del trato normal con sus compatriotas; como consecuencia, se veían obligados a buscar compañía de personas de vida depravada, los "pecadores".

Después de este curriculum vitae, creo que Leví no califica hoy para ser ministro, pastor, sacerdote, obispo, líder laico, etc; pero este es el tipo de personas que a Jesús le encanta llamar porque la camilla (testimonio) que cargan es una herramienta poderosa para evangelizar.

El Llamado requiere Respuesta Hoy, veamos este proceso en el pasaje, que es el mismo proceso que está usando en el llamado que te hace a ti:
  • Vio a un publicano llamado Leví: Jesús no llama al azar, no echa suerte para decidir; Jesús ve al hombre o a la mujer que llama, el ver a Leví y hoy el verte a ti significa que conoce tu historia, conoce lo que piensas, conoce lo que sientes, conoce lo que vives y sufres, conoce tu pecado, conoce tus crisis; y aún así se acerca a ti y te hace una invitación, no una imposición.
  • Sentado en el despacho de impuestos: Jesús no llama a personas que están sin hacer algo, no llama a gente desocupadas, Jesús llama a gente que está haciendo algo, gente que tiene su profesión, gente que está ocupada y en este caso Leví tenía su profesión. Hay muchos que dicen que los que estamos haciendo algo dentro de la iglesia es porque no tenemos más nada que hacer, nada más lejos de la realidad este comentario. Si en este momento te preguntas por qué estudiaste lo que has estudiado, por qué trabajas en lo que haces en tu vida secular, espera un poco porque estás en entrenamiento para algo grande en tu ministerio.
  • Sígueme: esto es impresionante, Jesús solo se acerca, mira y dice sígueme. Yo le pregunto a Leví, ¿qué tenía esa mirada de Jesús y qué sentiste cuando escuchaste esta palabra?. Hoy Jesús sigue llamando a hombres y mujeres para expandir su mensaje de amor y misericordia, así que no dejes de estar pendiente.
  • El, dejándolo todo, se levantó y le siguió: simple, ante una mirada e invitación como la de Jesús, solo queda tomar decisiones de una vez, esto no es para pensarlo tanto. Solo es dejarlo todo, levantarse y seguirlo sin cuestionamientos, sin preguntar para dónde vamos o qué vamos a hacer. 
Hoy la invitación es para ti que estás leyendo este blog, Jesús te está llamando de manera personal porque algo tienes que a él le gusta y sabe que eres una pieza importante en la evangelización.

Ya lo sabes, decídete de una vez y deja de dar tantas vueltas, porque El Llamado requiere Respuesta Hoy.

Paz y bien.





Comentarios

Entradas populares de este blog

Nuevos Proyectos de Evangelización

Designado para algo grande

Avanza a tu Jerusalén